Aiden Wilson Tozer, autor de esta frase, fue un profeta para la iglesia moderna.
Nació 1897 y murió en 1963. Fue un pastor y escritor que habló con la claridad de un profeta en tiempos de comodidad espiritual.
Nacido en una familia humilde de Pensilvania, llegó al evangelio siendo joven y sin formación teológica formal.
Sin embargo, su profunda vida de oración y su amor por la presencia de Dios lo convirtieron en una de las voces más influyentes del cristianismo del siglo XX.
Tozer no buscaba popularidad, sino pureza espiritual. Denunció la superficialidad religiosa de su época y llamó a la iglesia a depender totalmente del Espíritu Santo. Creía que la verdadera adoración no nace del ruido ni del espectáculo, sino del corazón rendido a Dios.
Entre sus libros más conocidos se encuentran La búsqueda de Dios y El conocimiento del Dios Santo, obras que siguen inspirando a creyentes de todas las generaciones.
Su legado permanece vivo en cada creyente que anhela una fe auténtica y un encuentro real con el Espíritu de Dios.
A.W. Tozer advirtió con profunda claridad:
“Si el Espíritu Santo fuera quitado de la iglesia hoy, el 95% de lo que hacemos continuaría y nadie lo notaría. Pero si el Espíritu Santo hubiera sido quitado de la iglesia del Nuevo Testamento, el 95% de lo que ellos hacían se habría detenido, y todos lo habrían notado.”
Esta frase nos obliga a detenernos y examinar en qué se apoya la iglesia actual. Muchas veces dependemos más de la organización, la tecnología o la elocuencia humana que de la presencia viva del Espíritu de Dios.
Tozer no criticaba el orden ni el esfuerzo, sino la autosuficiencia espiritual que reemplaza la comunión con el Espíritu. Su advertencia sigue vigente: cuando la iglesia actúa sin depender del poder divino, puede parecer activa, pero está vacía de vida.
El Espíritu Santo no es un adorno de la fe, es su fuente y su motor. Sin Él, los programas continúan, pero el fuego se apaga; los templos se llenan, pero los corazones permanecen fríos.
Por eso, más que preguntarnos qué hacemos por Dios, deberíamos preguntarnos:
¿Está el Espíritu Santo guiando lo que hacemos?
Solo cuando Su presencia es el centro, la iglesia realmente cumple su propósito y refleja la gloria de Cristo.
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A. W. Tozer, el pensador evangélico que pidió volver a lo esencial A. W. Tozer fue pastor, escritor y editor cristiano en el siglo XX. Sin formación académica, pero con hambre de Dios, influyó en la vida espiritual de miles con palabras cargadas de eternidad.
Biografía de A.W. Tozer Tozer es conocido por su profundo compromiso con la fe cristiana y su pasión por la búsqueda de una relación íntima con Dios. Durante su vida, desempeñó un papel importante en la promoción de la espiritualidad y la enseñanza bíblica.
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