Proverbios 15:1
"La blanda respuesta quita la ira;
Mas la palabra áspera hace subir el furor."
Este principio bíblico cobra valor en esta época en la que se ha convertido en una costumbre el insulto.
La pandemia ha exacerbado el ánimo de mucha gente que reacciona con palabras groseras, a veces hasta injuriosas y difamatorias, que desembocan en tragedias, enemistades y demandas judiciales.
La violencia física es generalmente la segunda parte de algo que inició con una ofensa que pudo haber sido:
• Una expresión verbal violenta o palabra hiriente.
• Quizás una expresión corporal provocadora o ademanes impetuosos o irrespetuosos.
La peor respuesta que se pude dar a una expresión iracunda es otra llena de soberbia y prepotencia.
La mejor respuesta que se puede dar a una palabra impetuosa es otra repleta de humildad y comprensión.
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Cristo te ama y me ama. Quiere que estemos en comunicación.